Fiel a su estilo, en solitario y sin ayuda exterior, la catalana SIlvia Vidal ha escalado una nueva ruta en el Kinnaur Valley, India.
En 25 días de septiembre y octubre, Silvia Vidal ha vuelto a abrir una nueva ruta en un gran Big Wall alejado del mundo civilizado.
Fiel a su estilo, la catalana ha escalado en solitario, y ha realizado las tareas de porteo y aprovisionamiento sin ayuda. Esto, evidentemente, añade muchos puntos a su actividad.
De hecho, Silvia partió hacia su objetivo sin apenas información; una estimación de la localización de la pared y su aproximación en Google Earth,eran las únicas referencias con las que contaba. Los porteadores locales le ayudaron a dirigirse en la dirección correcta, y a 3.800 metros, descargaron los petates en medio de la niebla, y se marcharon dejándole sóla, perdida en uno de los valles más desconocidos de toda la India.
En los siguientes 7 días, Silvia no pudo ni siquiera ver la pared a través de las nubes.
Tras establecer un campo avanzado a 4.430 metros y fijar los primeros 500 metros, decidió irse a vivir a la pared. En todo el tiempo que pasó en la montaña, todos los días hubo niebla y lluvia. Hasta tal punto que en uno de los jumareos, llegó a a perder la consciencia por hipotermia, provocada por el frío y la extrema humedad.
Sus calculos de comida y agua para 18 días se quedaron cortos para los 25 que al final estuvo en pared. Hacia la mitad de su aventura estuvo a punto de abandonar al encontrar un paño imposible de superar sin perforar. Pero tras descender, y buscar una nueva línea, decidió continuar, espoleada por su enormes ganas de escalar. "Siempre intento no taladrar, por lo que las dificultades de A4/A4+, comenta Silvia, son naturales, sin picados ni perforaciones.
Continuaba hacia arriba porque siempre pensé que el tiempo cambiaría...pero nunca lo hizo"
Su nueva via se llama Naufragi, y tiene dificultades de A4+ y 6a+, con una longitud de trazado de más de 1.000 metros.
Fuente: http://www.landher.net
Por: M.Marques
milton@mxb.com.br