Con siderado uno de los mitos vivientes del alpinismo mundial, capaz de coronar el Brad Peak en solitario o ascender tres de sus catorce ochomiles en pleno invierno, Krzysztof Wielicki se atrevió también a ponerse detrás de una cámara para dirigir el documental «Women in the mountains» con el que ha rendido su particular tributo a las mejores montañeras de su país. Ayer león tuvo la oportunidad de disfrutar de este cuidado trabajo y de la sapiencia de Krzysztof.
-”¿Existe mucha diferencia entre hombres y mujeres en el alpinismo?
-”Creo que no existe mucha. Eso sí, son más racionales y eso les permite contar con un plus que suple con éxito las posibles limitaciones físicas. A la hora de afrontar cualquier reto yo las veo como colegas, como socias.
-”¿Cómo surgió en un alpinista de talla mundial como usted realizar un documental sobre la vida de algunas de las mejores mujeres que han pisado la montaña?
-”La idea vino de hacer una serie de libros sobre la presencia polaca en el Himalaya y cuando llegamos al último pensamos que porqué no, si en los 70 y 80 hubo tanta presencia femenina polaca íbamos a obviar este aspecto. Y ahí empezó lo que hoy en día es una realidad.
-”¿Con qué montañera se quedaría?
-”Sin duda, con Wanda Rutkiewicz. Fue la que me llevó de la mano a la montaña, mi instructora. Pero también una mujer excepcional que hasta su muerte convirtió la montaña en un hábitat donde se desenvolvía como muy pocos, incluidos los hombres.
-”¿Como es la convivencia entre hombres y mujeres en una expedición?
-”Antes las mujeres hacían expediciones sólo de mujeres y los hombres de hombres. Todo esto ha evolucionando. Incluso en una expedición incluí a dos mujeres y la relación fue muy cordial e incluso nos aportó muchas cosas positivas, en gran medida porque el pensamiento de las mujeres es más lógico y sensato. Además, una mujer lleva a sus compañeros a mejorar en el tema de la higiene y de la educación. Una mujer en una expedició n siempre es bien recibida
-”¿Qué proyectos tiene en mente?
-”Escribir un libro sobre mi experiencia en solitario ascendiendo en Nanga Parbat. También tengo en mente escribir una serie de cuentos que recogan historietas y anécdotas de suceden en la montaña. En cierto modo escribir sobre la gente, con aquellos que he compartido experiencias escalando una montaña, incluso con personas que han fallecido y que las actuales generaciones de alpinistas, por desgracia, desconocen.
-”¿No se cansa nunca de la montaña?
-”Nunca. Incluso tengo en mente poner en marcha un proyecto para preparar a los alpinistas jóvenes para que puedan acometer escaladas en invierno. Y si todo va bien en un par de años podremos conseguirlo.
-” De todas las montañas que ha coronado, ¿cual es la que mayores problemas le ha dado?
-”Cada montaña tiene su momento y dificultad. Recuerdo el Everest. Una vez conseguido me dije, si has podido con él también puedes hacerlo con otros. Pero si hablamos de dificultad me quedo con el K2. También fue complicado coronar el Broad Peak, en cierta medida porque lo hice en solitario.
-”Qué opinión le ofrecen este tipo de festivales?
-”Me encanta poder participar en ponencias, debates, conferencias porque conoces gente y compartes experiencias. La montaña no sólo es el aspecto físico que conocemos, también es gente, son personas que tienen otras culturas y otras formas de pensar. Es más que el deporte en sí. ¿Has visto que los jugadores de fútbol organicen un festival?. No, porque a las personas no les interesaría.
Fuente: http://www.diariodeleon.es
Por: M.Marques
milton@mxb.com.br
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